"Hijo mío, no voy a obligarlo a convertirse en agricultor", explica este agricultor lleno de consternación.


Maxime Chaffangeon, criador de pollos ecológicos de la región del Loira, tuvo que sacrificar 8.000 pollos después de que un análisis en su granja revelara la presencia de salmonela en el aire. «No voy a obligar a mi hijo a ser agricultor», explica este afligido agricultor, quien también denuncia la dureza y severidad de las normas.
BFM TV